Lenguado a la sidra

Hace unos días leí que Isabel, bloguera de "Aliter Dulcia", invitaba a todo aquel que quisiera a participar en un concurso para celebrar los mil seguidores que tiene su blog, uno de los que habitualmente sigo yo también.
Consiste en preparar una receta asturiana o preparar algo con productos típicos de Asturias, pudiendo cada participante dar su toque propio. Se nos ocurrieron un par de potentes razones para participar y aqui está el resultado. Un buen lenguado a la sidra con almejas, acompañado de manzana a la plancha.

Tengo antecedentes asturianos y el cariño a esa tierra se nos ha inculcado desde pequeños, mis abuelos se vuelven locos con un vaso bien frío de sidra y eso fue lo que me dió la idea. Hemos elegido un buen pescado como base para el plato y después hemos convertido a la manzana en la protagonista del conjunto. Empezamos por los INGREDIENTES para dos personas:

2 lenguados pequeños,
1 manzana,
1/4 kg. de chirlas,
2 vasos de sidra,
zumo de un limón,
nata líquida.

PREPARACIÓN:
En primer lugar preparamos la salsa para lo que debemos poner a hervir el zumo del limón y los dos vasos de sidra. Esto se deja hervir hasta que reduce, llegando a quedar menos de la mitad de los líquidos que pusimos inicialmente. Entonces añadimos un chorro generoso de nata y dejamos hirviendo unos minutos más.
En una sartén colocamos láminas de manzana, previamente pelada y "fileteada" sin poner aceite. Vamos dándoles vueltas para que queden bien doradas por ambos lados.

Mientras, en la plancha de cocina (la nuestra es de la marca Princess), colocamos los dos lenguados con la piel oscura para abajo, los primeros minutos a máxima temperatura y a potencia media después. Les ponemos sal gorda y les colocamos unas hojas de papel de aluminio por encima para que quede como un "horno" y el calor los cocine por dentro. Pasados unos minutos (dependerá del tamaño del pescado) les damos la vuelta para que se doren por el otro lado y volvemos a colocar el papel de aluminio.
Cuando veáis que apenas le queda al pescado un par de minutos, será el momento de echar las almejas chirlas a la salsa de sidra, se abrirán en un periquete y ya la tendréis lista.

Al gustarnos el sabor del lenguado en sí no les hemos vertido encima la salsa sino que la hemos colocado en su salsera de forma que cada uno se sirva cuando le plazca.

Esperamos haber honrado como merece a la entrañable Asturias y, si además, conseguimos traernos a casa ese lote de productos típicos ¡pues mejor! Jajajaja.