viernes, 26 de julio de 2013

Baked Alaska invisible

pijasincomplejos.blogspot.com

No os podéis imaginar la rabia que tengo....  Voy ayer tranquilamente a publicar la receta mensual propuesta por Whole Kitchen cuando busco las fotos y empiezo a ponerme nerviosa. Bueno estarán con las fotos de la niña en el baño...Ah pues no... Pues con las de la niña en la cuna... Pues no... Pues estarán con las de la niña jugando con su muñequita... Pues no... ¡Pues entonces dónde puñetas están!
Después de 24 horas buscándolas y entre sudores fríos se confirman todos mis temores... ¡¡He borrado las fotoooooooooss!! ¿¿Pero en qué momento las he borradooooooo???

Llamando a la calma interior y después de dormir las horas que mi pitufa me ha dejado, decido publicar la receta de todas formas aunque no pueda ilustrarla....Sniff!! Con lo rico que estaba...
Whole Kitchen en su Propuesta Dulce del mes de julio nos invita a preparar el Baked Alaska. Sólo en aprenderme el nombre tardé un par de días y como era un poco complicado al final he acabado llamándolo "el Alaska" :-)
Tenia una pinta estupenda y estaba relleno de helado, y aquí ahora y siempre helado es igual a chocolate. Total, que no tenía elección, el Alaska sería de chocolate sí o sí, por dentro y por fuera, por la izquierda y por la derecha. Y así fue aunque no podáis verlo. Helado de chocolate sobre bizcocho genovés de chocolate y cubierto por merengue de chocolate. Mmmmmm....¡al ataque!

INGREDIENTES para 6 Alaskas:
-Bizcocho:
70 gr. de harina de repostería,
3 huevos grandes,
60 gr. de azúcar,
1 cucharadita de maicena,
1 cucharada sopera de cacao en polvo sin azúcar,
unas gotas de vinagre,
una pizca de esencia de vainilla.

deliciosadas.com
-Helado: hemos usado el helado de chocolate, praliné y caramelo de Haagen Dazs.

-Merengue de chocolate:
4 claras de huevo pasteurizadas,
200 gr. de azúcar glas,
100 gr. de cacao en polvo sin azúcar,
pizca de sal.

PREPARACIÓN:
Hemos empezado preparando el relleno de helado dejando la tarrina a temperatura ambiente hasta que se ha vuelto cremoso. Entonces lo hemos colocado dentro de 4 cuencos forrados con papel de cocina transparente cuyas esquinas cuelgan bastante por los bordes, aplastándolo bien. Lo metemos de nuevo en el congelador durante una hora pasada la cual colocaremos las planchas de bizcocho de chocolate, el que hemos preparado mientras el helado se refrigeraba.

El bizcocho genovés para lo que comenzamos separando las claras de huevo de sus yemas, reservando las primeras. También dejamos tamizada la harina junto a la maicena y el cacao, al menos tres veces.
Batimos en un cuenco grande con varillas las yemas de huevo con el azúcar hasta que quede esponjoso, añadimos la vainilla y continuamos batiendo. Reservamos.
Por otro lado montamos las claras a punto de nieve con unas gotas de vinagre que las estabilizarán. Mezclamos con suavidad la harina tamizada con las claras, echando una cucharada de cada una y lo agregamos finalmente a las yemas.
En un recipiente plano y amplio engrasado volcamos la masa distribuyéndola bien, horneamos a 180º hasta que el palillo salga limpio. Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Cuando esté frío sacamos el helado y, con ayuda de un cuenco vacío cortamos 4 planchas de bizcocho que colocaremos sobre el helado, asegurándonos de que queda bien pegadito. Cubrimos con papel transparente y volvemos a colocar en el congelador por unas 4-6 horas.

Al momento de servir montaremos las Alaskas, aunque también puede hacerse antes y congelarlas ya terminadas. Tenemos que hacer el merengue de chocolate así que montamos las claras a punto de nieve con una pizca de sal, cuando estén casi listas agregamos el azúcar glas y el cacao tamizado.
Cuando sea una mezcla firme la introducimos en una manga pastelera con una boquilla que nos guste y, desmoldando previamente los helados, los cubrimos con el merengue. Para terminar doramos las Alaskas con un quemador.

No es que me hubieran quedado preciosas pero es una lástima que no las podáis ver. Espero aprender de esto.... ¡Ay!




martes, 25 de junio de 2013

Savarín de limón


¡Eureka! Ya en verano, la estación de las flores secas y los trigales dorados, después de un montón de meses vuelve el Círculo Whole Kitchen y sus propuestas, se han tomado un tiempo pero ya están de vuelta y también los intentos de todos los participantes en realizar lo mejor posible las recetas que se sacan de la manga ;-)
No es que yo tenga mucho tiempo como ya comenté en entradas anteriores pero para estas invitaciones mensuales trataré de sacarlo y preparar algo medio competente.
Whole Kitchen en su Propuesta Dulce del mes de junio nos invita a preparar un clásico de la cocina francesa, el Savarín. Por supuesto en casa no lo habíamos hecho nunca así que, una vez más, nos estrenamos con el CWK.


Todo fue muy bien hasta el momento del emplatado en el que mi adorada hija de dos meses comenzó a berrear por hambre y tuve que dejar toda la cocina empantanada para correr a su lado y darle su tercer desayuno, jejejeje.
Por eso os pido un pelín de benevolencia, el almíbar de limón quedó demasiado líquido, las barritas de sandía son cada una de su padre y de su madre, y la nata está montada a la velocidad de la luz. Pero el resultado es rico, ¿eh?
Los INGREDIENTES para 3 savarín tipo mini son:
3 huevos,
100 gr. de azúcar blanquilla,
100 gr. de harina,
1 cucharadita de levadura,
una pizca de sal,
2 cucharadas de zumo de limón,
3 cucharadas de agua,
azúcar glas,
un chorrito de limoncello,
25 gr. de mantequilla derretida,
nata montada,
fruta fresca variada para decorar.


PREPARACIÓN:
Bueno, bueno. Empieza la marcha. Comenzamos montando las claras de huevo a punto de nieve, con la sal y una cucharada del azúcar total. Reservamos.
Por otro lado batimos el resto de los ingredientes de la masa, es decir, el resto del azúcar blanquilla, las yemas de los huevos, la harina y la levadura. Cuando esté listo mezclamos con las claras, con movimientos suaves que integren ambos pero sin perder el aire de las claras. El resultado debe quedar esponjoso.
Con la mantequilla derretida engrasamos los tres moldes y en ellos volcamos la masa final, la introducimos en el horno a 180º durante unos 15 minutos.


Durante la cocción vamos elaborando el almíbar, para lo que hervimos las 2 cucharadas de zumo de un limón mezclado con las tres de agua, el chorrito de limoncello y 3 cucharadas de azúcar glas. Dejamos reducir.
Cuando los bizcochitos estén listos, sin desmoldar, los mojamos con el almíbar y dejamos enfriar.


Una vez fríos los desmoldamos con cuidado, montamos la nata, azucaramos al gusto, vamos rellenando los moldes y los decoramos con la fruta fresca que tengamos en casa. Bien troceadita, no como la mía :-( Y ya solo queda hincarle el diente..... ¡aaaaammm!

¡Au revoir!

miércoles, 22 de mayo de 2013

Madres y cumpleaños

www.abrazandolamaternidad.com

Hoy mi madre cumple 60 estupendísimos años, recién estrenada como abuela. Ahora que mi niña ya ha nacido y también ahora yo soy madre puedo imaginar cómo me quiere, de dónde nace su fuerza para haber luchado siempre por mi y cómo se las apaña para estar a mi lado cuando la necesito.

¡¡FELICIDADES MAMI!!

 Y gracias como siempre.




viernes, 17 de mayo de 2013

Una nueva vida





Unos se van y otros apenas acaban de llegar. Una nueva vida es en esta ocasión motivo para escribiros y para hablaros de alegría inmensa. Aquí tenéis a nuestra primera hija, hoy hace un mes que nació para convertirnos en sus felicísimos padres. Como os podéis figurar ella absorbe prácticamente todo nuestro tiempo lo que traslada a segundos, terceros y cuartos planos las demás actividades, entre ellas la cocina.
Por eso os remito a dentro de un tiempo, cuando ella esté un pelín más crecidita, sus padres ya estén más  adaptados a su nuevo papel y su madre tenga tiempo entre toma y toma para algo más que ducharse y hacer la cama ;-)
Hasta pronto entonces, ¡un beso para todos!


miércoles, 3 de abril de 2013

Tarta salada con pasta filo


Bueno, bueno, con la cantidad de veces que usamos la pasta filo en casa y nunca había colgado una receta con ella como protagonista. ¡Con lo riquísima que está con cualquier cosilla que se le pone! Normalmente la utilizamos para preparar la típica pastela árabe (podéis consulta nuestra receta aquí) pero son tantísimas las posibilidades que no tendría hoy minutos para enumerarlas.
Por cierto, hace unos días vi un programa en la TV de cómo se elabora y es increíble lo complejo de la producción de tipo artesanal, amasando, haciendo las "hojas", separándolas con maicena y sábanas de algodón...uf!!


Pues aunque lo que más me hace ilusión sería tratar de preparar pastelitos árabes de esos tan maravillosos rellenos de frutos secos, con miel y pasas.... Mmmmmm... En esta ocasión había que ser más práctica, dejaremos el momento dulce para más adelante.
Para almorzar quería hacer una tarta salada con verduritas y otras sobras que teníamos en el frigorífico y por eso pensé que, en lugar de utilizar hojaldre o masa quebrada quedaría distinto con la pasta filo.


Los INGREDIENTES para 4-6 personas son:
1 paquetito de pasta filo (aunque no lo usaremos completo),
mantequilla derretida,
4 espárragos verdes,
1 cebolla grande,
1 paquete de bacon ahumado,
1 puñado de champiñones frescos,
1 bote de leche evaporada,
2 huevos XXL (ó 3 si son de los medianos),
pimienta recién molida y sal,
quesos variados (nosotros hemos puesto brie y emmental para gratinar).


PREPARACIÓN:
En un primer momento lavamos y cortamos las verduritas, las reservamos. En una sartén echamos el bacon troceado a fuego fuerte para que el calor disuelva su grasa, cuando esté muy doradito lo apartamos y reservamos también.
En esa grasita que ha soltado vamos pochando toda la verdura a fuego medio. No nos gustan muy tiernas así que no ponemos fuego bajo para que no se cuezan, como verdaderamente nos gusta la verdura es poco hecha y casi crujiente.


Cuando esté la verdura en el punto que os guste agregáis el bacon, la leche evaporada, los quesos y los huevos batidos. Mezcláis todo y esperáis que los quesos se derritan y los huevos cuajen, salpimentar al gusto.
Hay que esperar a que enfríe un poco así que aprovechamos para ir preparando las hojas de pasta filo, colocándolas en un molde para horno, superponiéndolas una a una pincelando con mantequilla derretida al micro cada cual antes de disponer la siguiente encima.


Dentro colocamos el relleno ya templado y espolvoreamos queso por encima. Con las esquinas de hojas de pasta que sobresalen del molde hacemos un rollino y las remetemos por los filos, ¡como hacemos con las sábanas de la cama!
Precalentamos el horno a 200º, bajamos a 180º e introducimos nuestra tarta hasta que esté doradita. Bien caliente está exquisita no sé si fría también, como le ocurre a la pastela. Muy mala no debe estar, no? ;-)


sábado, 30 de marzo de 2013

Magdalenas de castaña con Nutella


Cada otoño-invierno me gusta preparar algún dulce con castañas, ya sé que van muy bien también como guarnición en un plato salado pero es que la repostería "castañil" me encanta. El año pasado preparé unos bizcochitos con chocolate y este año, aunque también lo llevan no está incorporado en la masa.


Este otoño pasado me he quedado con las ganas de salir por la sierra a coger las castañas que caen al suelo, que nos encanta, con coger una docenita ya nos venimos contentos a casa. Pero no me he atrevido con este tipo bombona de butano que tengo, requetembarazada con cero equilibrio y con mucho miedo de resbalarme. Así que he tenido que conformarme con disfrutar comiéndomelas.


Los INGREDIENTES para 12 magdalenas medianitas son:
200 gr. de puré de castañas sin azúcar,
150 gr. de azúcar moreno,
120 gr. de mantequilla o aceite de girasol,
1 cucharadita de ron negrita (también vale brandy),
150 gr. de harina,
1 cucharada de levadura,
1 huevo a temperatura ambiente,
1 pellizco de sal,
Nutella al gusto,
azúcar glas para decorar.


PREPARACIÓN:
En un cuenco amplio ponemos la clara del huevo con el poquito de sal y batimos con las varillas eléctricas hasta que quede como un merengue. Añadimos la yema, el puré de castañas, el azúcar, la mantequilla y el ron, seguimos batiendo hasta que se integren.
Agregamos ahora la harina y la levadura, volvemos a batir, quedará una masa no muy densa y esponjosa. Ya sólo queda volcarla en las cápsulas de papel, hornear a 185º unos 15 minutos y... ¡ya están hechas las magdalenas!


Para rellenarlas necesitáis un cuchillito (o un descorazonador de fruta), una cucharilla y algo de paciencia. Con el cuchillo he hecho unos huecos como veis en las fotos que luego he rellenado de Nutella con la cuchara, poniendo aproximadamente la mitad de cada una, las he vuelto a tapar con cuidado y, para que no se note el agujerito las he "nevado", espolvoreando azúcar glas tamizado por encima.

¡A comeeeeeeeeeeeeeeeer!




jueves, 14 de marzo de 2013

Pan de chocolate


Uff!! ¡¡Mucho tiempo sin usar la panificadora!! Tras unos meses en los que hemos cocinado básicamente con nuestra súpermegamaravillosa Thermomix ayer miré fijamente a mi pani y no me pude aguantar, ¡mañana mismo hago pan! Me dije. Y para este "re-estreno" he elegido algo nuevo, un pan dulce. No he preparado antes nada parecido y los panes que hemos hecho han sido los que habéis ido viendo, todos ellos de tipo salado.


Y no puede ser de otra manera, no puedo coger otro ingrediente, ¡tiene que ser de chocolate negro! :-) Para hacerlo me basé en una receta de "Comer con poco", aunque la cambié el tipo de harina. Los INGREDIENTES para una pieza de pan de 750 gr. aprox. son:
400 ml. de leche,
100 gr. de queso tipo Philadelphia,
1 cucharadita de sal,
1 cucharada sopera de azúcar moreno,
600 gr. de harina de repostería,
1 paquetito de levadura seca de panadería,
100 gr. de chocolate negro 72% picado a cuchillo,
1 caja de gotas de chocolate negro (he usado una del Lidl).


PREPARACIÓN PANIFICADORA:
Más sencillo es complicado, introducimos todos los ingredientes en la cubeta empezando siempre por los húmedos, tratando de que la sal y la levadura no se toquen. Para eso he puesto la sal como el primer ingrediente de los secos, y la levadura el último.
Introducimos la cubeta en la panificadora y seleccionamos el peso, el tueste deseado y el programa de pan dulce (el número 4). Cuando éste finalice lo desmoldamos y lo dejamos enfriar sobre una rejilla.


PREPARACIÓN TRADICIONAL:
Esto ya es más trabajoso, pero no más difícil. En un cuenco amplio colocamos los ingredientes en el mismo orden antes comentado, amasamos hasta que la masa tenga una apariencia como la que vemos en las primeras fotos, elástica y brillante. La tapamos con un paño limpio y la dejamos reposar hasta que doble su volumen, tardará una hora y media aproximadamente. Si queréis acelerar el proceso sólo tenéis que meter el cuenco dentro del horno precalentado a 50 º.
Una vez la masa haya crecido la pasamos al molde deseado y la horneamos a unos 180º durante unos 50 minutos o una hora. Si os gusta la corteza crujiente meted en el horno medio vaso de agua.
Pasado este tiempo sacamos del molde y dejamos enfriar sobre la rejilla, igual que en el caso anterior.


Prometo que está riquísimo y nada empalagoso, es más, si queréis que el resultado sea realmente dulce debéis doblar la cantidad de azúcar moreno. Tal como nos ha salido a nosotros está estupendo para tomar solo pero también con queso de untar, o tostadito con mantequilla.


Si es que llevando chocolate no puede estar malo....


miércoles, 27 de febrero de 2013

Pechuga de pavo a la lavanda


La protagonista del día es la lavanda, y cómo no iba a serlo si se nos ha puesto el jardín cuajado de esas flores moradas preciosas. Era inevitable no utilizarlas para algo rico y aunque lo que realmente me apetecía era preparar un buen bizcocho teníamos uno recién hecho en casa así que va a tener que esperar....sniff!


Dicen que la lavanda es muy buena para calmar la ansiedad, los nervios, el insomnio y las taquicardias, además de lo bien que huele claro. Será casualidad pero es verdad que yo hoy he dormido de miedo cuando hacía ya días que mi pequeña no me dejaba echar la noche del tirón.


Para 4 personas hemos utilizado estos INGREDIENTES:
4 pechugas de pavo,
4 lonchas hermosas de jamón cocido,
4 lonchas estupendas de queso tierno,
8-10 flores de lavanda,
un vasito de vino blanco,
pimienta negra recién molida,
malla para mechar carne,
aceite y sal.


PREPARACIÓN:
Antes de nada comentaros que es importantísimo dejar macerar la carne de un día para otro por lo que sería bueno que lo tuvierais en cuenta al elaborar esta receta. Y dicho esto comenzamos detallando cómo hacerla.
Cada pechuga de pavo tendremos que convertirla en un único filete, sin importar que no tenga el mismo grosor por todas partes.
Después los extendemos uno a uno y salpimentamos, sobre ellos disponemos las lonchas de jamón cocido en primer lugar y las de queso para terminar. Enrollamos con cuidado e introducimos cada uno en una malla independiente, haciendo un nudito bien prieto por cada lado para asegurarnos de que no se saldrán los jugos más tarde.


En una fuente un poco profunda colocamos los rollitos y echamos por encima el vino, metemos también las flores de lavanda tronzadas con las manos para que suelten aromas y salpimentamos. Removemos todo bien, tapamos con papel transparente de cocina y dejamos reposar en el frigorífico toda la noche, si podemos y nos acordamos los giramos de vez en cuando para que toda la carne entre en contacto con el vinito.


Al día siguiente sacamos los rollitos de pavo del macerado, con papel de cocina los secamos y en una sartén caliente los sellamos exteriormente para que queden "rubios". Precalentamos el horno a unos 185º y vamos preparando una bandeja en la que ponemos un chorrito de aceite de oliva y luego los rollos ya dorados. Si queréis podéis añadir un poco del vino de maceración para que al final quede como salsa de acompañamiento.
Los horneamos a esta temperatura hasta que queden bien hechos por dentro y aumenten de color. ¿No han quedado preciosos?
Antes de servir cortamos con ayuda de una tijera las mallas de cada pechuga para que los comensales puedan comerlos cómodamente. ¡A comeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeer!


martes, 26 de febrero de 2013

Cojín nube


Como os podéis imaginar ahora la mayor parte de mi tiempo libre va dedicado a nuestra hija, a la que por cierto apenas le quedan unas 8 semanas para nacer. Yo sigo sin molestias o dolores de importancia, la verdad, ¡algo que le agradeceré a ella en persona en cuanto la vea! :-D
Sigo por tanto con un embarazo estupendísimo en el que sí estoy teniendo que acostumbrarme a dormir poco por las noches (ya me cuesta encontrar una postura que nos resulte cómoda a las dos), a tener acidez de estómago cada día a partir de las 8 de la tarde, y a habituarme a verme reflejada en el espejo como si fuera una bombona de butano, yo que en raras ocasiones en mi vida he pasado de los 50 kilos de peso.


Se me metió en la cabeza hacerle una cojincito con forma de nube, mezcla de dos ideas que vi e Internet, una de ellas era la de una "nube mutiusos" que podéis encontrar aquí y que sirve como cojín y como cambiador. La otra era una "nube almohada" que me gustó más estéticamente y que podéis ver aquí.


En esta última web, llamada "One more mushroom", vais a disfrutar de montones de ideas para bebés y niños con la ventaja de que explican cómo llevarlas a cabo. Es de ahí de donde he sacado el material necesario y lo fundamental para poder realizar mi propia nube.


Le he puesto unos detalles de mi gusto como estas dos florecitas, ¿pelin cursi? Bueeeeeeno, jejeje. En la foto sale la ardilla-perro que hice con el guante de lana, ella dice que la nube es muy cómoda :-P



martes, 19 de febrero de 2013

Alitas de pollo con miel


Pocas cosas más naturales y nutritivas me gustan más, ¡y casi nunca os hablo de ella! Me encanta la miel y tengo la suerte de que me regalan un bote cada pocos meses y lo mejor es que es no es de fábrica sino de un amigo de mi madre que es apicultor y tiene panales de los que saca la miel de forma manual.
Esta miel no es líquida sino granulosa y se endurece en cuanto llegan las bajas temperaturas, y está tan rica que a mi me gusta a cucharadas, sin nada más.


Y no sólo es buena por su sabor, es que además es mucho más rica en nutrientes que el azúcar por lo que trato de sustituir una por otra cuando es posible. No sólo aporta menos calorías sino que además nos aporta ácidos naturales, minerales, proteínas, aminoácidos y otras enzimas que son beneficiosas para la salud. Y además evita la pérdida de calcio que provoca el consumo de azúcar, ¡y eso para una embarazada como yo es importantísimo!


Hoy la he usado para cocinar siguiendo una receta muy sencilla que nunca me acuerdo de preparar, pero hace unos días la comí en casa de mi abuelita y se me ha antojado cocinarlas en casa. Los INGREDIENTES que hemos utilizado han sido:
1 kg. de alitas de pollo,
3 cucharadas soperas de miel,
3 cucharadas soperas de vinagre balsámico,
aceite y sal.


PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno a 190º mientras preparamos la fuente, en ella echamos un chorrito de aceite de oliva y disponemos las alitas de pollo, con el lado de la piel hacia arriba. Ponemos sal al gusto por encima.
En un cuenco pequeño echamos la miel y el vinagre, mezclamos con una cuchara hasta que esté bien mezclado. Entonces disponemos esta mezcla sobre las alitas, bañándolas y tratando de que penetre la salsa por todos lados.


Introducimos en el horno cuando esté a la temperatura indicada y esperamos unos 30-40 minutos para que estén bien hechas por dentro. Yo he abierto el horno cada 10 minutos para, con ayuda de un cucharón, coger la salsa del fondo de la fuente y "regar" las alitas, procurando que así cojan más el sabor.


Antes de sacarlas he puesto durante unos minutos el grill para que tueste la piel, lo que más me gusta de cocinar esta parte del pollo es conseguir que quede la piel crujiente. Mmmmmm..... Como veis se me ha ido un poquito la mano y algunas se han quemado un pelín.
Pero estaban taaaaaaaaan buenas...... :-)


viernes, 15 de febrero de 2013

Cojines para un regalo


Hace unos meses nacieron los mellizos de mi amiga Sara y yo quería hacerles un regalo hecho a mano por mí. La parejita nació y yo les tenía preparados estos dos cojines para que pudieran ponerlos en sus cunas, con las iniciales de sus nombres. La idea la saqué de "Nicoletas Handmade", un blog-tienda con cosas muy coquetas para niños, de hecho no descarto tratar de hacer alguna cosilla más de las suyas. Visitadla, os encantará.


De camino iba así ensayando para poder hacerle otros a mi pequeña, alguno con su inicial y otros con diferentes formas y telas. La mezcla de tejidos siempre me ha gustado y tenía claro que para los mellis quería algo que combinara telas diferentes pero que jugaran dentro de la misma gama cromática.


Ya sé que es muy típico pero bueno, decidí que el del niño lo haría en tonos azules y los de la niña en tonos rosados. Compré tela de sobra para que me sobrara y después poder hacer los de mi pequeña. Telas con cuadros vichy en celeste y rosa, con rayas y flores, con globos y lazo.


No he querido añadir ni botones ni otros elementos decorativos para que los bebés no se hagan daño, son sencillos y con un cierre de velcro autoadhesivo para que puedan desenfundarlos cómodamente y poder lavarlos tantas veces sean necesarias.


El tutorial que seguí lo encontré en la web Practicopedia, donde podréis visualizar este video explicativo muy sencillo y que os dará la información necesaria para elaborar un cojín básico. Ya sólo tendréis que añadir vuestra imaginación para que el resultado sea personalizado.


Fácil y barato. ¡Hay que probar!

martes, 12 de febrero de 2013

Sandwich "Tano"



Vaaaale, estoy embarazada y me aprovecho. Me da hambre a horas extrañas y mezclo dulce con salado de forma habitual. De todas formas, antes de escribir esta entrada he preguntado al "sufridor en casa" si estoy siendo una embarazada coñazo y me ha dicho QUE NO. ¡Ueeeeeeee!! :-)
En los casi 8 meses de embarazo que ya han pasado no he tenido antojos muy claros de una comida en concreto aunque sí es cierto que me apetecen mucho los sandwiches y que últimamente me ha dado por comer fresas a todas horas (que por cierto me salen a un ojo de la cara).


Cuando Tano me pregunta desde la cocina qué me apetece cenar muchos días le contesto desde mi sitio preferido del sofá:
_¡Un saaaaaaaandwich!
Y él asoma la cabeza por la puerta del salón sonriendo y me dice.
_Lo sabía.
Y los borda señores, de verdad que sí. Es un experto en emparedados del tipo que sea, aprovecha lo que hay en el frigorífico, juega con las sobras que se encuentra y el resultado siempre es ex-qui-si-to. Les unta mantequilla en los panes exteriores y los pone en la plancha caliente, los aprieta con una pala y espera a que el calor penetre y funda el queso. El que más me gusta es el mixto más sencillo hecho con pan integral, con lonchas de pavo cortadas muy finas y queso emmental muy derretido.


Esta noche hemos cenado un sandwich diferente cada uno, el mio era muy aburrido para colgarlo en el blog así que os pongo una foto del suyo. Lleva dos salchichas tipo bradwurst alemanas fileteadas y hechas a la plancha, igual que el huevo, y debajo aunque no se ve hay varias lonchas de queso brie.
El sandwich lo ha puesto en la plancha sin el huevo, con la mantequilla untada, para poder apretarlo bien. En el último momento ha hecho el agujerito en el pan y ha introducido el huevo ya hecho.
¿Buena pinta, no? El mío estaba de muerte y lo he disfrutado hasta la última miguita de pan, como era de esperar me lo he comido a su salud.
¡Viva mi cocinero!