viernes, 12 de octubre de 2012

Calzone casera


Os confieso que últimamente me resulta prácticamente imposible dedicarle a la cocina tiempo extra para disfrutar o innovar, cocino para que podamos alimentarnos y poco más. Mi embarazo no me ha provocado nauseas ni vómitos pero me siento agotada y podría dormir todo el día si me dejaran :) A cualquier hora sería capaz de acostarme, ¡lo juro!
Por eso he colgado poquitas entradas en las últimas semanas, espero que lo entendáis... ahora mismo tengo otro tipo de horno encendido las 24 horas al día y espero recuperar mis fuerzas poco a poco ahora que estoy traspasando la barrera de las 13 primeras semanas.
Esta mañana sin embargo, estando los dos tranquilamente en casa, las energías han vuelto a mi cuerpo y me han dado ganas de meterme en la cocina y disfrutar un rato de amasar y hornear. Por eso se nos ocurrió preparar una calzone, plato italiano que Tano suele pedirse en los restaurantes italianos. ¡Y nos lo hemos pasado en grande!


Los INGREDIENTES que hemos utilizado para dos "calzoni" medianas han sido:
·Para la masa:
200 cc. de agua templada,
2 cucharadas soperas de aceite de oliva,
1 sobre de levadura de panadería deshidratada,
400 gr. de harina de fuerza (la hemos comprado en Mercadona),
1 cucharadita de sal,
un huevo crudo batido.
·Para el relleno:
tomate frito,
jamón cocido,
queso emmental,
cebolleta,
queso camembert,
albahaca,
bechamel.
·Para la bechamel:
25 gr. de mantequilla,
55 gr. de harina de trigo,
400 cc. de leche,
sal,
pimienta recién molida,
nuez moscada.


PREPARACIÓN: 
Comenzamos elaborando la masa tipo pizza para lo que templamos el agua en el microondas y la volcamos en un recipiente amplio, después añadimos el aceite, la levadura, la harina y la sal. Comenzamos mezclando con una pala de madera y cuando todo está algo unificado seguimos haciéndolo con las manos. ¡Esto es una delicia! ¡Nos encanta amasar!
Cuando la masa esté elástica y sea uniforme la dejaremos reposar en un recipiente tapado con un paño limpio dentro del horno precalentado a 50º.
Mientras vamos preparando los ingredientes del relleno: cortamos las lonchas de jamón cocido en cuadraditos, y los quesos, y también picaremos la cebolleta.
Además tendremos que preparar la bechamel, para lo que en una sartén caliente ponemos la mantequilla y un pelín de aceite, dejamos que se derrita y añadimos la harina, removemos con una cuchara de madera durante unos minutos. Después vamos echando poco a poco la leche, mezclando sin descanso con unas varillas de silicona que no dañen la capa antiadherente de la sartén. Cuando toda la leche esté incorporada y no haya grumos pondremos la sal, la pimienta y la nuez moscada.


Ya habrán pasados los 30 minutos de reposo de la masa de pizza y podremos comenzar a montar las calzoni. Hemos hecho dos bolas y les hemos pasado el rodillo hasta convertirlas en un par de planchas redondas, finas y brillantes sobre las que hemos ido colocando los ingredientes, todos ellos dispuestos en la mitad de la masa como si estuviéramos haciendo una media pizza. La otra mitad debe quedar libre para que nos sirva de tapadera.
Cuando hemos puesto todo lo que nos apetece y en las cantidades que se nos antoja, pincelamos de huevo batido los bordes para que al cerrar se peguen bien, luego doblaremos la masa y con los dedos rizaremos todo el borde.
También pincelaremos con el huevo toda la superficie de las calzoni, esto hará que se queden doraditas por encima.


Al cerrar la masa se creará un minihorno interior que provocará que los quesos se derritan y los ingredientes se mezclen, unificando aromas y sabores. Cuando se saca del horno y se corta...madre mía el olor que sale de dentro. ¡Qué maravilla!



No hay comentarios:

Publicar un comentario